Inmersa en un lote de casi 1 ha, con una cantidad y variedad de especies autóctonas y teniendo como límite este, el Arroyo Yacanto; Casa del cauce, se encuentra implantada en el centro de la expansión, sobre un cauce natural.
Su topografía accidentada y abundante flora, fueron el desafío principal al momento de idear la vivienda. Desde el inicio, se decidió conservar y respetar su entorno al máximo. Eso nos llevó a terminar de convencernos de que la propuesta tenía que estar suspendida del suelo, construida sobre una estructura independiente de pilotes y una platea, que finalmente fue de más de 200m2.
El planteo morfológico y funcional fue definido sobre el lote, y sus límites, los determinaron los árboles. Fue así que se logró un angosto y extenso canal de circulación, rodeado de vegetación, que divide espacialmente la propuesta en dos zonas.
La zona sur (dormitorio principal), se encuentra retirado del resto de la vivienda, con este canal biblioteca completamente vidriado hacia la orientación este. La idea era brindarles a los clientes, la mayor tranquilidad, debido a que este sector, permite percibir con mayor claridad el sonido del arroyo.
Los espacios comunes, zona sur, tienen expansión directa hacia el lote, en esa zona, la diferencia de nivel entre la vivienda y el lote es casi nula.

Los extensos ventanales en el desarrollo general de la propuesta, permiten una directa relación con su entorno natural. Desde el interior, las visuales son atípicas, ya que se pueden observar tanto los troncos, como las copas de los árboles, además, del extenso recorrido del canal del cauce.
Casa del Cauce se puede definir como una vivienda calma que respeta lo natural y en total dialogo con el entorno que la rodea. Es muy fácil disfrutar de su paisaje, y a la vez, sentirse seguro y refugiado.